Texcoco en el Día Mundial contra la Hepatitis

TEXCOCO, México.

La hepatitis es una enfermedad que está rodeada de mitos, desde la forma de contagio, síntomas y el tratamiento pero cada 28 de julio se conmemora el Día Mundial de la Hepatitis para crear conciencia entre la población sobre dicho padecimiento y fomentar una cultura de la prevención; es una inflamación del hígado y dependiendo el tipo A, B, C, D y E se relaciona la forma en que fue contraída.

Por ejemplo tipo A, en su mayoría de relaciona con algunas prácticas sexuales y por ingerir agua o alimentos contaminado, suele presentar síntomas leves y las personas generar cierta inmunidad; la B, se relaciona con fluidos corporales, por la transfusión de sangre contaminada, o utilizar mismas jeringas en hospitales o al consumir drogas; la C se puede transmitir por transfusión de sangre contaminada y a diferencia de la A y B no hay vacunas; la D ocurre en infección simultánea con personas que padecen hepatitis B y la E, al igual que la A, se da por el consumo de alimentos contaminados y se ha hecho presente en países desarrollados.

La hepatitis es una enfermedad que ataca el hígado y muchas veces no presenta síntomas, existen tres tipos y se puede contagiar por transfusiones de sangre, de madre a hijo durante el parto, mediante relaciones sexuales sin protección por compartir artículos de aseo personal cepillo de dientes, rastrillos, jeringas o material para inyección con alguien que ya este contagiado además de la mala higiene en la elaboración de comida o alimentos contaminados con heces fecales.

En México según datos de la Secretaría de Salud, existen al año 24 mil casos de hepatitis A, B y C, siendo el segundo país en América Latina con mayor número de contagios, la mayoría derivados de alimentos contaminados con heces fecales que pertenecen al tipo A, que con el paso del tiempo se resuelve y que no se convierte en un padecimiento crónico.

De los tipos B y C, de mayor contagio por medio del contacto directo con sangre, existen cerca de 750 y mil 900 casos respectivamente en el 2017; existiendo una alta probabilidad de curar la C, si es detectada a tiempo y si se cuenta con el tratamiento adecuado, situación que se ha contemplado con la aplicación de vacunas en los primeros meses de vida y con refuerzo con el paso del tiempo.

Cada año se estima que se vacunan contra la hepatitis B cerca de 6 millones de personas, más refuerzos en adolescentes que no fueron vacunados desde bebés; a pesar de ello sigue existiendo un alto grado de desconocimiento sobre las formas de contagio, además de que la Secretaría de Salud cuenta con vacunas para grupos específicos como adictos, la población en general debe tener presente que cualquier persona se puede contagiar no importa si tiene tatuajes, es gay o simplemente recibió una transfusión de sangre contaminada.

De esa forma cada 28 de julio la Organización Mundial de la Salud (OMS), busca crear conciencia sobre una enfermedad que aumenta año con año para que los países con altos índices implementen acciones de prevención.

alianzatex