Buscan jefa encargada de estrategia anticovid-proceso de vacunación
El coordinador/a debe ser responsable, persona seria y que no se deje seducir por los reflectores. ¿Es mucho pedir?
“La gente dice que nosotros nos tomamos las cosas muy en serio, pero es la única forma en la cual llegas a algún lugar”. – THOM YORKE
“Es delicioso dar con alguien que acepte las pequeñas ironías como expresiones de la mayor seriedad”. – ALDOUS LEONARD HUXLEY
“La seriedad es sólo la corteza del árbol de la sabiduría; sin embargo, sirve para preservar a esta”. – CONFUCIO
Se busca coordinador, coordinadora que sepa de planeación estratégica ya no solo para combatir la pandemia —máxime que se viene una segunda ola y nunca logramos salir de la primera—, pero sobre todo para enmendar la propuesta que ha realizado hasta este momento la SSA, particularmente Hugo López-Gatell. Alguien que pueda estructurar adecuadamente la campaña de información que se requerirá en torno a los términos de vacunación (plazos, etapas, esquemas, poblaciones, etcétera).
La cuenta no para en los 100 mil muertos y más de millón de contagios. Peor: la tasa de infección ha aumentado en el último trimestre, y viniendo la temporada fría, se estima que se llegará a los 150,000 fallecidos antes de marzo, a menos que se dé un fuerte golpe de timón.
Así que puede ser un buen momento para desistir del hecho de que López-Gatell siga siendo el encargado de combatir la pandemia o, bien, como en muchos otros casos de la 4T, que él siga siendo “oficialmente” el jefe, pero quien haga las labores, directrices y coordine estrategias sea otra persona.
Por favor, estimado lector, no piense en el sentido estrictamente normativo/atribución de responsabilidades de acuerdo al organigrama del gobierno federal, porque entonces no llegaremos a diseñar un esquema adecuado. Es más, si a esas vamos, el mismo López-Gatell no debería de ser el encargado de combatir el covid; eso debería recaer en el titular de la Secretaría de Salud. Pero ese no es el único caso. El ejemplo por antonomasia es Marcelo Ebrard, quien coordina varias cosas que en la norma NO son su responsabilidad.
Por ende, debiera ser plausible proponer — al menos considerar— a un coordinador alterno para enfrentar a la pandemia y máxime ante la tarea logística de poder llevar la vacuna –una vez que esté a la venta- a todos los confines de la nación.
Desde luego, Ebrard sería el candidato lógico a coordinar la distribución de las vacunas. Pero hay otra opción, quizá más seria.
¿Podría hacerlo extraoficialmente Claudia Sheinbaum? Ello obviamente sin dejar de ser la jefa de gobierno de la CDMX, mandato al que no puede renunciar. La respuesta es sí, pero requeriría además un adecuado equipo que la acompañara para trazar criterios y una política pública integral tanto para disminuir el número de infecciosos/decesos como también para distribuir la vacuna e informar y accionar a la ciudadanía en torno a ello.
Podría continuar llevando las riendas de la Ciudad de México y desde la misma capital de nuestro país coordinar la estrategia nacional de vacunación anticovid y medidas de prevención y protección. Y no, ella no tiene que tener el título formal de todo este asunto, pero podría ser la que coordine en la práctica.
Seguramente se dejaría de “medir” las camas vacías y se utilizarían más pruebas para conocer de forma más rápida posibles focos de contagio y seguimiento de estos, como sugiere la OMS. Hasta ahora, ella es de las pocas gobernantes que han implementado las pruebas gratuitas (bueno, con cargo al erario) a su población.
Además, se podría tener la seguridad de que ella no utilizaría la vacuna con fines políticos o para “castigar” a “x” o “y” grupo, como ya lo esté proponiendo Donald Trump en Estados Unidos al hablar de su población y decir que la vacuna no irá a Nueva York porque el alcalde se atrevió a cuestionar sus criterios.
¡Lo anterior es precisamente lo que Claudia Sheinbaum o quien coordine la adquisición, distribución y suministro de las vacunas anticovid debe de evitar a toda costa! Esa persona (y su grupo de trabajo) deben de tener la integridad ética y moral para garantizar que la distribución de la vacuna no se vuelva una cuestión política y con criterios electorales (y electoreros).
Imposible pensar que quien tome la estafeta la tendrá fácil, empezando porque el pedir otra vez el cierre total de negocios y actividades es imposible. Se deberá exigir, eso sí, un mayor compromiso a comerciantes y población en general con las medidas de seguridad y las restricción de horarios y giros.
En el caso de que fuera Claudia Sheinbaum la encargada (de forma oficial u extra oficial) debería demostrar que en el manejo de esta responsabilidad no es opaca ni corrupta como algunos de sus pares de la 4T. Ser absolutamente imparcial y eficiente en la distribución de las vacunas. No ‘agarrar pleito’ con ningún fabricante de las mismas y, ante todo, lo más importante, no pensar que “la autoridad moral”, los “detentes”, el “mole de guajolote” y otros menjurjes lograrán frenar los contagios.
Se busca coordinador/a responsable, que sea persona seria y que no se deje seducir por los reflectores.
¿Es mucho pedir?
sdpnoticias