Tlaxcala tiene retos que cumpliré Lorena Cuéllar

La administración que encabeza Lorena Cuéllar Cisneros enfrenta múltiples retos, cuya superación depende no sólo de la gobernadora, sino de cada uno de los integrantes de su gabinete y colaboradores cercanos.

No se trata sólo de pensar en la permanencia de Morena al frente del gobierno estatal y alinear los programas locales con los federales, sino de lograr que las familias tlaxcaltecas mejoren su calidad de vida y por ende que el estado avance en su desarrollo socio económico, para ubicarse a la altura de la capital del país.

Y en ese propósito, resulta fundamental el desempeño de quienes se encuentran al frente de las carteras de seguridad, economía, campo, trabajo y salud, por citar sólo los rubros fundamentales para el desarrollo de la sociedad tlaxcalteca.

Es claro que Tlaxcala tiene los recursos naturales y humanos para salir adelante y superar el rezago que prevalece, por desgracia en algunos puntos de su territorio, pero ello depende en gran medida de que los secretarios estatales desarrollen de manera adecuado el trabajo que les ha asignado la gobernadora Lorena Cuéllar y con ello respondan a la confianza que los votantes depositaron en su proyecto.

No basta con tener expectativas, el tiempo avanza y el voto de confianza se agota o incrementa, en niveles satisfactorios de aprobación, a partir de lo resultados que se perciben.
A casi seis meses del inicio de la gestión de Lorena Cuéllar Cisneros, resulta fundamental comenzar a colocar sobre la balanza.

Cada ciudadana o ciudadano Tlaxcalteca tiene desde su particular óptica un balance sobre el desempeño de la administración lorenista.

Aprecia si la calidad de vida de su familia es mejor; si su entorno familiar o social es más agradable o no; si la seguridad de sus calles o colonias, así como en el transporte público es satisfactoria o no.

Así como si los servicios de salud en clínicas y hospitales del sector público están a la altura de las necesidades, amén de que cuenten con los medicamentos necesarios; si los programas de apoyo a los pequeños y medianos productores del campo han sido entregados a tiempo.

Si el empleo formal se ha ampliado o sigue ganando terreno la informalidad; además de si existe o no una adecuada aplicación de la justicia laboral.

Las y los tlaxcaltecas tienen, más allá de todo ejercicio de evaluación o medición, la ultima palabra, sobre el desempeño de la administración de Lorena Cuéllar, quien puede no ser culpable de los yerros de los integrantes de su gabinete, y en general de todos los servidores públicos de la administración estatal, pero finalmente es responsable indirecta de ello.

Lo que por el momento se percibe en el ambiente de la administración pública estatal es la necesidad de comenzar a realizar los ajustes necesarios para responder a las expectativas de la sociedad tlaxcalteca.

No es posible esperar a la realización del balance obligado del primer informe, las y los ciudadanos demandan a diario resultados, para ellos el tiempo apremia y esperan percibir en los hechos los beneficios prometidos a lo largo de la campaña.