¿Quieren vender el coche? Es hoy
Jonathan Ruiz Torre.
¿Ya vieron cuánto les darían por él? La gente suele decir que es una tontería comprar un coche nuevo, porque recién sacándolo de la agencia ya vale un 30 por ciento menos… Habrá que cambiar esa filosofía, al menos durante este año.
Revisen en Mercado Libre cuánto vale un Jetta 2020 usado… los precios superan 360 mil pesos, que se parecen mucho a los que pide la Volkswagen por un modelo 2021.
El Inegi advierte de un aumento de 15 por ciento en el valor de los coches durante los dos años contados hasta septiembre. Eso supera la inflación general.
Quienes ya tienen un vehículo y quizá puedan prescindir de éste, tienen una ventana de oportunidad para venderlo a buen precio.
Es un fenómeno atípico, sin duda, el que los consumidores tengan la sartén por el mango. Esa ventana no durará mucho tiempo abierta.
Sucede que todo lo que se necesita para producir autos está caro. El petróleo duplicó su precio en 12 meses, consecuentemente, también todo lo que está hecho de plástico; el acero cuesta 72 por ciento más que un año antes, faltan chips, y el precio de transporte para llevar productos de un lado a otro está que arde por el congestionamiento de puertos rebasados por todo lo que la gente compra en línea. Faltan incluso contenedores que hoy rentan a precio de cuarto de hotel.
¿Percibes que los costos de materias primas para fabricación van a seguir creciendo? Le preguntaron la semana pasada en San Antonio, Texas, al responsable en México de compras de Continental, una proveedora importante de este sector industrial:
“Nuestros clientes también se verán afectados por los incrementos de precios”, reconoció Carlos Gómez, durante su participación en el USMCA Automotive Industry Summit, convocado por la organización de medios MexicoNOW.
Ojo, esto no es para siempre. El encarecimiento de los coches puede detenerse como consecuencia de muchos factores, van tres:
Uno. La construcción de nuevas plantas de semiconductores, gracias en parte a incentivos multimillonarios en Estados Unidos. Esos chips son útiles en varias partes de los coches y su escasez contribuye al alza de los precios actuales.
Dos. Más competencia en la venta de automóviles usados, Kavak, por ejemplo.
Guillermo Prieto dijo la semana pasada que, preocupados por su avance debido en parte a precios reducidos, varios concesionarios solicitaron revisar las posibles ilegalidades en las que estaría incurriendo la empresa tecnológica encabezada por Carlos García Ottati. A decir de lo expresado por el líder de la AMDA, no encontraron.
Lo que sí notaron es que la empresa sacrifica márgenes de utilidad en ánimo de ganar mercado. Por tanto, dijo Prieto, los concesionarios que representa la asociación que él encabeza, están obligados a hacer lo mismo en ánimo de competir.
Eso podría traer imprevistas rebajas en los coches ‘seminuevos’ que ustedes ven en las agencias.
Tres. Luego está lo de los ‘chocolates’. La legalización de todos los vehículos que entraron indebidamente a México.
Su comercio alivia las cuentas de familias de escasos recursos que requieren vehículos para transportarse y que no tienen acceso a créditos para comprar otra cosa.
Pero su autorización por parte del gobierno federal también provocará que algunos empiecen a batallar para vender su viejo coche legal usado. Quienes podrían comprarlo, ahora tienen acceso a vehículos regularizados provenientes de Estados Unidos, que pueden llegar a todo el país.
Consecuentemente, quienes querían vender su viejo coche nacional para comprar un modelo más reciente, probablemente no podrán hacerlo.
Eso forma una cadena que golpeará todo el mercado, hasta impactar el precio del coche que ustedes manejan.
Me dicen que la reunión pactada para el viernes de la semana pasada con la industria automotriz en la Secretaría de Gobernación en torno a este asunto, fue movida para hoy lunes, cuando ya nada puede cambiar la decisión de la regularización, una vez que fue decretada este fin de semana: Ésta ayuda a personas de la frontera, no hay duda, pero en detrimento de todos los demás.
Todavía hay tiempo para quien, queriendo vender su coche, se mueva rápidamente. Hay una ventana de oportunidad y está abierta.