Se doblan los Yunes azules de Veracruz y votarán a favor de la reforma al Poder Judicial; ahora son aliados de Morena. Que cinismo
11 de Septiembre 2024
Literalmente custodiado por dos rudos de Morena, los senadores Félix Salgado Macedonio y Oscar Cantón Zetina, quienes lo flanquearon en calidad de guardaespaldas, el senador veracruzano Miguel Ángel Yunes Linares – quien minutos antes había tomado protesta tras la licencia de su hijo Miguel Ángel Yunes Márquez – ofreció una conferencia de prensa para confirmar entre líneas y en los hechos, lo que se venía diciendo desde el pasado fin de semana: que los Yunes panistas de Veracruz traicionaron al grupo legislativo del PAN, a 1.2 millones de veracruzanos que les dieron su voto el 2 de junio y a 130 millones de mexicanos al entregarle su voto a Morena para aprobar la reforma al Poder Judicial. A través de su cuenta de X, la senadora Lily Téllez definió al nuevo Judas veracruzano: “aventé 30 monedas al traidor que vendió a la Patria en el Senado, se llama Miguel Ángel Llunes Linares”, escribió, luego de que Yunes Linares tomó protesta y se fue a ocupar una curul en la bancada de Morena. El aún dirigente nacional del PAN, Marko Cortés, le dijo momentos antes desde la tribuna a su ahora ex correligionario que habría sido más decente que les hubiera tomado la llamada el fin de semana, cuando ni él ni su hijo se presentaron a la reunión del grupo parlamentario del PAN, para decirles de frente que los iban a traicionar. Sin embargo, tanto Yunes Márquez como el ex gobernador panista se perdieron todo el fin de semana y el lunes, y no respondieron las llamadas de los azules, mientras en los medios de comunicación y a través de las redes sociales, circulaba el rumor, con pelos y señales, de la reunión de los Yunes panistas de Veracruz con el coordinador del grupo legislativo de Morena, en el senado, Adán Augusto López Hernández. En la tribuna, Marko Cortés también le recordó a Yunes Linares su primera defección en 2003, cuando siendo diputado priista traicionó al PRI y se sumó a la bancada del PAN junto con la entonces dirigente nacional del SENTE, Elba Esther Gordillo. En su defensa, desde la Tribuna, Yunes Linares siguió el guión de la traición, ya conocido desde entonces, y le hizo fielmente el trabajo sucio a Morena, al enfocar sus baterías contra el dirigente nacional panista, a quien acusó de traidor y de no haber hecho campaña para llegar al senado por la vía plurinominal. Yunes trató sin éxito de negar lo evidente: la consumación de la traición. Y de nada le valieron sus exabruptos frente a los gritos de “traidor”, “traidor”, “traidor”, de sus otrora correligionarios. Lo cierto es que Yunes Linares prometió dar a conocer con palabras su posicionamiento sobre el sentido de su voto con relación a la reforma al Poder Judicial, aunque en los hechos, su postura está más que cantada. Con su defección, los veracruzanos pierden a un senador de oposición, pues Yunes Linares o Yunes Márquez, desde este martes son aliados de Morena-PVEM-PT. Muchos lo advirtieron: está en su naturaleza.