Starmer llama a Johnson “incompetente en serie” por su gestión del coronavirus

El líder de la oposición laborista se ofrece como alternativa al primer ministro en un discurso que los analistas califican de serio y sólido.

El líder de la oposición laborista Keir Starmer ha fustigado al “premier” Boris Johnson alegando que “no da la talla para el puesto” y criticando su “incompetencia en serie” por su tardía reacción ante la pandemia.

“Hemos aprendido mucho sobre este primer ministro durante esta crisis”, proclamó Starmer en el cierre de la conferencia virtual del Partido Laborista. “Los diputados conservadores lo saben, su gabinete lo sabe, todos lo sabemos. No es una persona seria”.

“Cuando surge un problema, Johnson responde deseando que desaparezca o huyendo”, advirtió el líder laborista. “Cuando empezó el problema de los tests (de coronavirus) hizo como si no existiera. También esperó que desapareciera el problema de la frontera en Irlanda, pero cuando se dio cuenta de lo que había firmado, decidió romper las leyes internacionales”.

Starmer se ofreció como líder de la “oposición creíble” y como alternativa al primer ministro, marcando las “grandes diferencias” entre ambos y recordando su bagaje como fiscal general.

“Mientras él (Johnson) escribía columnas flipantes sobre las bananas, yo defendía a las víctimas del terrorismo e incriminaba a los terroristas. Mientras él era expulsado de un periódico por inventarse citas, yo estaba luchando por la justicia y por el estado de derecho”.

En su discurso no faltó sin embargo la autocrítica a la era Corbyn, en la que desempeñó un notable papel como portavoz del Brexit. “Merecimos perder las elecciones”, dijo, en el momento de pedir a los votantes del “cinturón rojo” que den una segunda oportunidad al laborismo.

Starmer se esforzó por redimir la imagen de Tony Blair y recordó que los laboristas “ganaron siempre que aspiramos a modernizar el país, como lo hicimos con la creación del Sistema Nacional de Salud (NHS). En otra velada crítica a su predecesor, Starmer recalcó que “la lección es no mirar hacia al pasado sino hacia el futuro, y responder a las grandes preguntas sobre lo que nos espera en el 2024 o el 2030”.

Su discurso fue en general bien recibido por los analistas, que destacaron la imagen de solidez y seriedad que proyecta el líder la laborista, por delante de Johnson en un hipotético mano a mano personal en los sondeos. En apenas cinco meses, desde que sucedió a Corbyn en los momentos críticos de la pandemia, Starmer ha logrado recortar los 26 puntos de diferencia hasta un empate virtual al 40% en las últimas encuestas entre el Partido Conservador y el Partido Laborista.
EL MUNDO