Contagio deliberado; gritos de médicos y enfermeras en Veracruz
Ignacio Alvarez
La muerte ayer de mil 473 personas, se convirtió en el segundo día de enero con más muertes, el primero fue el 21 de enero con mil 803. El Estado Mexicano desde sus tres niveles de gobierno prefiere reducirse a un simple espectador y quedarse en el semáforo preventivo, que pagar una factura en lo social y económico con la con la valiosa consecuencia de salvar vidas.
En Veracruz se anuncia una medida de cierto rigor para suspender de manera parcial las actividades del 28 de enero al 2 de febrero. La burocracia se va a casa, pero no se ven medidas de disciplina con mayor fuerza y decisión para contener el problema. En pocas palabras el contagio corre bajo el riesgo personal de los ciudadanos.
Los gritos de los médicos y enfermeras para que se cuiden se pierden entre el estruendoso sonido de las fiestas en todos los niveles en todos los municipios. Tan sólo en la Delegación Norte del IMSS se reportan 23 trabajadores de la salud fallecidos.
De acuerdo a las cifras oficiales en los últimos 10 meses se han muerto seis mil 935 veracruzanos por Covid-19 y hay un registro de mas 50 mil contagiados, pero no hay registro de una sola persona sancionada por no cumplir las reglas de prevención
El mapa es crítico, real y dramático, pero también ignorado por la mayoría de los ciudadanos que abusan de un gobierno en sus tres niveles relajado, tolerante y negligente ante la presencia de la muerte con o sin cubrebocas.
