Texas: la gigantesca tormenta de nieve que afecta al sur de EE.UU. y que ha dejado más de 20 muertos y millones de personas sin electricidad
El invierno está causando estragos en gran parte del sur de Estados Unidos.
Una fuerte tormenta provocó la muerte de al menos 24 personas y dejó a millones sin electricidad.
En Texas se registraron apagones generalizados porque la red de energía se vio colapsada por un aumento en la demanda.
Millones de personas en el estado, que rara vez experimenta temperaturas tan bajas, están luchando para hacerle frente a la falta de energía y al intenso frío.
Más de 13 millones de personas, cerca de la mitad de la población de Texas, tuvieron algún tipo de interrupción en el servicio de agua.
Y a casi siete millones de los habitantes del estado se le pidió que hiervan agua del grifo antes de consumirla después de que el temporal provocara cortes de energía en las instalaciones de tratamiento.
El clima extremo continuará hasta el fin de semana, según pronosticaron las autoridades.
Las muertes atribuidas a la tormenta se produjeron en Texas, Luisiana, Kentucky, Carolina del Norte y Misuri.
El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, aprobó el domingo pasado el estado de emergencia para Texas, que ha estado cubierto de nieve y hielo desde que azotó la tormenta el fin de semana.
La tormenta llegó incluso al norte y centro de México, donde millones de personas también llevan días experimentado cortes de energía intermitentes.
“Estoy en Houston, Texas, muerto de frío”, escribió el usuario de Twitter Chris Prince.
“No hay electricidad, no hay calefacción, no hay agua. Tengo cuatro niños pequeños. ¿Cómo está pasando esto?”, añadió.
Otro usuario, Josh Morgerman, escribió que un amigo en Texas no le había quedado alternativa que “quemar muebles en la chimenea” para mantenerse caliente.
Los científicos han relacionado el cambio climático con un número creciente de eventos severos en todo el mundo, incluidos huracanes, olas de calor y frío e inundaciones.
“Desastre de salud pública”
Las muertes a causa de esta tormenta intensa incluyen accidentes de tráfico, así como algunas personas que sufrieron intoxicación por monóxido de carbono al hacer funcionar automóviles y generadores en el interior para mantenerse calientes.
“Este es un desastre de salud pública absoluto”, dijo un funcionario de salud de Houston a la estación de televisión local KPRC-TV.
“(La intoxicación por monóxido de carbono) ciertamente ocurre cuando hace frío, pero nunca en estas cantidades”, detalló.
Un condado informó que había registrado más de 300 casos sospechosos de intoxicación de monóxido de carbono durante la ola de frío.
Al menos cuatro personas murieron por un incendio en una casa en Houston que, según las autoridades, pudo haber sido provocado por velas.
La ola de frío también obligó a cerrar los centros de vacunación contra la covid-19 durante varios días y ha obstaculizado la entrega de dosis.
Mayor frío en tres décadas
El estado ha experimentado algunas de sus temperaturas más frías en más de 30 años, algunas áreas alcanzaron los -18 ºC el domingo.
El alcalde de la Houston, Sylvester Turner, instó a quienes no tienen electricidad y no pueden hervir el agua del grifo a que consigan agua embotellada siempre que sea posible.
“La energía no se restaurará por completo, probablemente durante un par de días más”, dijo a los periodistas en una conferencia de prensa este jueves.
La policía de Houston y los equipos de respuesta a desastres entregan agua embotellada a las personas con discapacidades que no tienen acceso a transporte, aseguró.
Turner también instó a las personas que habían dejado los grifos abiertos para evitar que las tuberías se congelaran a no hacerlo, en un esfuerzo por ayudar a conservar el suministro.
Las casas en Texas normalmente no están protegidas contra el clima frío, lo que significa que las temperaturas interiores en los hogares bajaron rápidamente a cero después de que fallaran los sistemas de calefacción.
Las tuberías congeladas también suelen estallar, a pesar de los intentos de algunos propietarios de aislarlas del frío con mantas.
“Todavía estamos en medio de esta tormenta invernal”, advirtió, instando a la gente a evitar viajar por las mañanas y las noches, calificándolos como “los momentos más peligrosos”, dijo el alcalde Turner.
Hasta el jueves, 900 sistemas públicos de agua se han visto afectados por la tormenta invernal, según dijo de un portavoz de la Comisión de Calidad Ambiental del estado al diario Texas Tribune.
Y si bien el gobernador de Texas, Greg Abbott, informó que 1,2 millones personas recuperaron la electricidad, aún unos 382.000 habitantes del estado estaban sin luz, según el rastreador PowerOutage.us.
El jueves por la tarde, el Servicio Meteorológico Nacional (NWS) dijo que el sistema de tormentas estaba aflojando gradualmente, pero advirtió que “temperaturas anormalmente frías permanecerán durante el fin de semana”.
El miércoles, más del 71% de EE.UU. estaba cubierto por nieve.