Mujeres a merced de la delincuencia en Tabasco

De acuerdo con cifras del SESNSP, en la entidad delitos como violación simple, así como hostigamiento y abuso sexual se han disparado en el gobierno encabezado por Morena

Al conmemorarse este 8 de marzo el Día Internacional de la Mujer, las cifras de delitos cometidos en agravio de las mujeres en Tabasco no son nada alentadoras, aún a pesar de que de informes oficiales reportan una disminución en feminicidios. De este modo, de acuerdo con información del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), aunque del inicio de la administración de Morena en la entidad, que encabezó en su inicio el actual secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, y actualmente el gobernador interino Carlos Manuel Merino Campos, los feminicidios han registrado un importante descenso respecto a los tres años anteriores, delitos como la violación simple, el hostigamiento sexual y el abuso sexual registran importantes incrementos.

Así, tenemos que 2016 a 2018, cuando estaba en el poder el exgobernador Arturo Núñez Jiménez, la cifra de feminicidios fue de 95, mientras que de 2019 a 2021 se registraron 57, es decir, disminuyeron en un 40 por ciento; sin embargo, un delito que tuvo un incremento considerable fue el hostigamiento sexual, al pasar de 400 a 681, lo que equivale a un 70.25 por ciento.

Le siguen el abuso sexual, que pasó de 439 a 573 casos (30.52 por ciento), y la violación simple, cuyo incremento fue de un 9.24 por ciento, al pasar de 952 a mil 40 casos.

De acuerdo con la asesora de Análisis y Estadística del Observatorio Ciudadano Tabasco, Julia Arrivillaga Hernández, los números del SENSP indican que el estado ocupa el primer lugar nacional por cada 100 mil habitantes en feminicidios con 0.37 casos, mientras que la media nacional es de 0.11; mientras que en números netos, se ubica en el sexto lugar.

En total, durante el primer mes de 2022 fueron 601 tabasqueñas las que padecieron algún tipo de violencia: feminicidio, homicidio, secuestro, extorsión, corrupción, lesiones y violencia familiar, y los índices están lejos de mostrar una tendencia a la baja. Tan sólo el año pasado, se iniciaron diariamente 21 carpetas de investigación por violencia familiar, alcanzando un incremento de 20.88 por ciento, lo que representa un récord histórico; mientras que en promedio, cada día tres mujeres presentaron lesiones dolosas, es decir, el número creció en 24.2 por ciento, y cada semana una mujer fue asesinada.

Y el inicio de 2022 no ha sido mejor. Tan sólo en enero, de acuerdo al Prontuario emitido por la Fiscalía General del Estado (FGE) reportó cinco feminicidios, tres de los cuales ocurrieron en 24 horas. Y aún así, no hay un avance respecto a la emisión de la Alerta de Género en la entidad.

Colectivos feministas tienen “otros datos”; las mujeres están en la indefensión

Mientras que las autoridades informan que el delito de feminicidio en Tabasco ha disminuido, colectivos feministas del estado tienen otras cifras. Así lo expresó en entrevista exclusiva para El Heraldo de Tabasco Marilo Alcudia, integrante de Marea Verde en la entidad, quien señala que las autoridades hacen una clasificación muy rebuscada de los feminicidios para no catalogarlos como tal.

“Nosotras tenemos que de 2015 a la fecha hubo 170 víctimas de feminicidio, y otras 208 que fueron por homicidios dolosos; estamos hablando de casi más de 380 víctimas mujeres que han sido asesinadas de forma violenta”, expresó, al tiempo de señalar que los colectivos feministas no han sido tomados en cuenta por las autoridades para la creación del Centro de Justicia para las mujeres.

Asimismo, señala que si bien es cierto que el gobierno estatal no puede declarar como tal la Alerta de Género, sí pueden incidir y hacer la solicitud, según consta en el Artículo Séptimo de la Ley Estatal de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia: “ahí está establecido que el gobierno puede hacer una reunión de trabajo para analizar la situación de violencia en las mujeres y ver si es procedente o no una solicitud de la Alerta de Género; entonces no ha sido un trabajo en el que se nos considere a nosotras, que sea interdisciplinario, que haya un diálogo”.

El colectivo tiene documentadas muchas violencias que se han ejercido en contra de las mujeres en el estado; no se trata sólo de feminicidios, sino de otras violencias que son su preámbulo. “Recordemos que el feminicidio es el punto máximo de violencia que vive una mujer; antes de que se cometa han habido otras violencias que ella padeció, estamos hablando de una antesala muy grave como son la violación, el hostigamiento sexual, el abuso sexual y también el no pago de las pensiones alimenticias”.

Alcudia afirmó que, de acuerdo a cifras del SESNSP, en los últimos dos años se iniciaron un total de 22 mil 115 carpetas de investigación por delitos contra la familia, de las cuales 19 mil 105 son carpetas por violencia intrafamiliar, y 2 mil 946 son por incumplimiento de las obligaciones de asistencia familiar, pero que al denunciar estas situaciones, inmediatamente la integridad de la víctima se vuelve más vulnerable, ya que “los agresores así reaccionan; como se empiezan a ver amenazados, la mujer sufre mayor violencia; les mandan mensajes de odio, diciendo que les van a hacer daño, que se desistan de las acciones que están haciendo, y en muchos casos, lamentablemente ellos las engañan diciéndoles ‘ya voy a cambiar’, ‘vamos a reunirnos para hacer una separación pacífica’, y ellas obviamente creen, porque es su deseo dejar ese círculo de violencia de forma tranquila, y es cuando ellos las tienen en sus manos y lamentablemente ocurre el feminicidio”. Otro tipo de violencia es la irresponsabilidad por los padres por pasar la pensión alimenticia.

Marilo reprochó que las autoridades hagan todo lo posible por no registrar este tipo de delitos, y por no iniciar carpetas de investigación cuando existe una denuncia por parte de mujeres que son víctimas de violencia digital, cuando sus fotografías están en las redes y son extorsionadas ya se con dinero o propuestas indecorosas en contra de su voluntad a cambio de no divulgarlas. “Cuando ellas van a denunciar, la Fiscalía les dice que como no hay una foto en los mensajes donde las estén agrediendo, o sea, no hay una foto para identificar al agresor, no les pueden iniciar el procedimiento”.

De igual forma, las autoridades hacen oídos sordos cuando las mujeres inician una denuncia por violencia intrafamiliar y presentan como pruebas mensajes amenazantes de muerte por parte de sus parejas, estas son desechadas, ya que los jueces ponen en tela de juicio su veracidad, insinuando incluso que ellas mismas pudieron escribirlos.

“Obviamente, cuando estas situaciones se empiezan a minimizar, pasan desapercibidas; no hay una capacitación, no se juzga con perspectiva de género; las mujeres están en total estado de indefensión, porque al no encontrarse un delito que perseguir, entonces es cuando los agresores empiezan a tomar las acciones aun más violentas, y como ellas no tienen ninguna autoridad que les esté otorgando esa protección, esa garantía a sus derechos como víctimas, es cuando ocurren los feminicidios, o los intentos de feminicidios; ya vemos el caso de Ana María, que fue atacada en un juzgado por su propia pareja”.

Marilo Alcudia considera que las acciones emprendidas por el gobierno no son suficientes para garantizar que las mujeres tengan una vida libre de violencia: “el gobierno piensa que con que haya mayores oportunidades de empleo, con que haya un crecimiento del PIB, con que haya proyectos de independencia económica para las mujeres la violencia se va a acabar, y no es así”.

La integrante de Marea Verde Tabasco refirió que se deben tomar políticas públicas y realizar una auditoría de las carpetas de investigación con dilación, además de realmente sensibilizar y capacitar al personal en perspectiva de género, y darle un seguimiento metodológico y evaluar que realmente estén aplicando los conocimientos adquiridos en la materia. “De entrada no hay un seguimiento que se pueda medir con variables si está incidiendo o no; la otra es justamente la auditoría al personal de todos los organismos que atiendan casos con víctimas, para ver si se está juzgando con perspectiva de género, si no hay dilación en las actuaciones; que se hagan mesas de trabajo para poder ver cómo darle esa reparación de daño a las víctimas, que les crean a las víctimas, que les den la protección de vida cuando pidan medidas precautorias, o lo que comúnmente se conoce como órdenes de restricción, que en verdad se les proteja cuando se les emita una, porque hay víctimas que aún con la orden de protección siguen siendo acosadas, y llaman a la policía diciéndoles que su pareja les contactó, que se presentó en el domicilio y la policía no está, o llegan como dos horas después”.

“Sí es importante que por una sola vez, se hagan de lado ideas partidistas, porque esto es gobierno y todos los involucrados independientemente del partido que sean; también es parte de la sociedad civil empezar a quitar los prejuicios, estigmas, a combatir la violencia, a comenzar a hablar de las conductas; a las mujeres siempre se nos ha enseñado cómo defendernos, qué hacer y así, pero ¿Cuándo se ha hablado del agresor?, ¿Cuándo se han visibilizado los tipos de conductas que tiene los agresores?, ¿Cuándo se ha pedido hacer un autoexamen a los ciudadanos, a las ciudadanas, de los prejuicios, los estigmas, los roles de género que hemos normalizado, pero que en realidad son violencia?”, externó.

El colectivo Marea Verde Tabasco está supliendo la labor del gobierno, dando acompañamientos, asesorías e información a las mujeres víctimas de violencia para que estén informadas de sus derechos y de todas las actuaciones que deben hacer; “l gobierno debe de tener un diálogo, debe de hacer compromisos y que esos compromisos tengan también un seguimiento que hayan sanciones en caso de que no se estén cumpliendo”.

Finalmente, Marilo Alcudia pidió a las autoridades que dejen de deslindarse de sus obligaciones y tomen con seriedad la lacerante violencia que padecen las mujeres.

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