Qué dijo Luis Donaldo Colosio en su discurso en el Monumento a la Revolución y por qué fue tan polémico

Lunes, 6 de marzo de 2023

Fue durante casi una hora, que el candidato habló de frente con los mexicanos, ganándose la admiración de todo un pueblo
Este lunes 6 de marzo, se cumplen 29 años desde el memorable discurso que presentó Luis Donaldo Colosio frente al Monumento a la Revolución en 1994, mismo que provocó un cambio de perspectiva completo en el pueblo mexicano y que hasta la fecha, sigue siendo recordado como el discurso más polémico por parte de un candidato a la presidencia del país.

El candidato presidencial del Partido Revolucionario Institucional (PRI), señaló su posición ante el partido que representaba, sin embargo, también miro de frente la tonalidad gris que se encontraba en México en aquel entonces, hablando no solo desde lo político, sino también desde lo humano.
“Yo veo un México con hambre y con sed de justicia. Un México de gente agraviada, de gente agraviada por las distorsiones que imponen a la ley quienes deberían de servirla.”, dijo durante el discurso.

Las palabras que el priísta dirigió a los mexicanos, se quedó guardado en la memoria colectiva de cientos de personas, quienes en un intento de escuchar los cambios que éste tenía para el país, terminaron conociendo el panorama que la mayoría de políticos prefiere ignorar.

“Sabemos que el origen de muchos de nuestros males se encuentra en una excesiva concentración del poder, concentración del poder que da lugar a decisiones equivocadas, al monopolio de iniciativas, a los abusos, a los excesos”, dijo.
Esta frase sin duda provocó el asombro de quienes creían que solo hablaría de la otra cara de la moneda, cuando en realidad, admitió que uno de los principales problemas que existe en México, es el exceso de corrupción en su gobierno.

“Yo veo un México de trabajadores que no encuentran los empleos ni los salarios que demandan, pero también veo un México de trabajadores que se han sumado decididamente al esfuerzo productivo”.

No solo se enfocó en presentar a los mexicanos la manera en que llevaría el cambio en el país, también se encargó de detallar el ‘por qué’, bajo una postura empática, en donde no buscaba solo prometer, sino también explicar el problema desde la raíz.

“¡Es la hora de cerrarle el paso al influyentismo, a la corrupción y a la impunidad!, es la hora de la Nación”, dijo.
Fue durante casi una hora, que el candidato habló de frente con los mexicanos, ganándose la admiración de todo un pueblo, sin embargo, la suerte terminó jugándole mal, arrebatando su vida 17 días después de haber hablado con la verdad.