Con el sello de Morena en la frente, expulsión de Yunes Márquez del PAN acotará a oposición para impugnar leyes
18 de Septiembre 2024
– Aunque de facto ya es harina de otro costal y lleva el sello de Morena en la frente luego de su traición al votar a favor de la reforma al poder judicial, con la expulsión del senador Miguel Ángel Yunes Márquez del PAN y del grupo parlamentario, la oposición perdería la posibilidad de presentar acciones de inconstitucionalidad contra reformas aprobadas por la mayoría morenista y sus aliados en el Senado. Y es que, las bancadas del PAN, Revolucionario Institucional (PRI) y Movimiento Ciudadano (MC) tenían justo los 43 votos requeridos para acudir a ese recurso establecido en el artículo 109 constitucional, que permite a una minoría parlamentaria presentar un juicio ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) contra leyes federales o tratados internacionales que consideren violatorios de la Carta Magna. Junto con el voto de Yunes Márquez, falta la decisión del senador Daniel Barreda, de MC, quien provocó un escándalo al no presentarse a la sesión del pasado martes, ya que el coordinador emecista, Clemente Castañeda, denunció desde temprano y hasta la madrugada que estaba desaparecido y retenido bajo acusaciones penales en Campeche. Al final, Barreda aclaró que debió acompañar a su padre a una diligencia judicial, pero fue el segundo voto que faltó a la oposición en la discusión de la reforma al Poder Judicial. La primera vez que se acudió a la acción de inconstitucionalidad fue en 2007, cuando parte de senadores del PRI y el PAN, junto con todos los de la Revolución Democrática (PRD), se inconformaron con la llamada Ley Televisa, que se había aprobado a favor del consorcio televisivo a cambio de impulsar la campaña presidencial de Felipe Calderón. El 1 de junio de 2007, con el voto de ocho ministros, la SCJN declaró inconstitucional esa ley, con el argumento de que violaba la libertad de expresión, el derecho a la información y la libertad de prensa. Ese recurso, que pueden promover las minorías parlamentarias, 33 por ciento de integrantes de cada Cámara del Congreso, volvió a usarse en la Legislatura que acaba de concluir y de manera constante, ya que el llamado bloque opositor, que conformaron PAN, PRI, MC y PRD en el Senado, acudió a él para frenar las principales reformas del presidente Andrés Manuel López Obrador. Contaron además con el apoyo de la SCJN, que se convirtió en su principal aliada, aseguró el exsenador José Narro. Iniciaron en 2018, con la Ley Federal de Remuneraciones de los Servidores Públicos, que señaló que ningún funcionario podría ganar más que el Presidente de la República y que debió recorrer un proceso legislativo de dos años. Los opositores controvirtieron en los pasados seis años una treintena de leyes, entre ellas la que posibilitó que la Guardia Nacional (GN) pasara al control administrativo de la Secretaría de la Defensa Nacional (GN), la que liquidó la Financiera Rural y la eliminación de los fideicomisos del Poder Judicial. “La situación es ahora muy distinta: junto con los partidos del Trabajo (PT) y Verde Ecologista de México (PVEM) conformamos una mayoría de dos terceras partes y la oposición, con menos de un tercio, ya no podrá frenar el avance de la Cuarta Transformación”, aseguró por su parte el senador morenista Óscar Cantón Zetina.