SILENCIOS, AMPAROS Y RUMORES: RADIOGRAFÍA DEL PODER MEXIQUENSE

El poder en el Estado de México no siempre grita: a veces calla, se ampara, filtra rumores, disputa territorios y celebra fiestas sin contabilidad. En esa coreografía de signos —más elocuentes que cualquier discurso— se revela un sistema en tensión rumbo a 2027.

* Rumbo a 2027, silencios, amparos y rumores exhiben la disputa real por el control político del Estado de México.

Por: EXPEDIENTE SECRETO

METEPEC: EL VACÍO COMO ADVERTENCIA

Metepec fue escenario de un silencio calculado. El alcalde Fernando Flores Fernández (PAN), presidente municipal de Metepec y figura con proyección estatal, convocó fuerza, discurso y multitudes, pero los liderazgos del PAN decidieron no llegar. La ausencia no fue descuido: fue método. No fue olvido: fue mensaje. Cuando un liderazgo local empieza a parecerse más a una marca personal que a una estructura partidista, las élites recuerdan quién autoriza el crecimiento.

En la ecuación aparecen Anuar Azar Figueroa, dirigente estatal del PAN en el Estado de México, y Enrique Vargas del Villar, senador y principal operador del panismo mexiquense rumbo a 2027. La lectura interna es clara: ningún liderazgo local, por popular que sea, está autorizado a expandirse sin alinearse a los equilibrios del partido. El discurso “ciudadano” de Flores dejó de ser estrategia de comunicación para convertirse en una amenaza simbólica a la marca PAN. Medirlo sin arropo fue una forma de probar si su fuerza es real o solo espejismo mediático.

El vacío también funcionó como recordatorio de disciplina vertical: los liderazgos se autorizan desde arriba, no se autoproclaman desde el territorio. En clave electoral, Metepec fue laboratorio para medir si Flores puede sostener aspiraciones sin el aval de la dirigencia estatal ni del grupo de Vargas, que busca mantener el control del proceso interno panista hacia la sucesión de 2027 ¿Fue un informe… o una sentencia política anticipada?

MANZUR: EL AMPARO QUE ANTICIPA

El amparo penal 1305/2025 no es un trámite: es un aviso. José Manzur Quiroga, exsecretario general de Gobierno del Estado de México durante la administración de Eruviel Ávila Villegas (PRI), operador de redes políticas y administrativas profundas, optó por blindarse antes de que un expediente se convierta en acción penal. El juzgado admite, dicta suspensión y fija fecha. Poco se ve; mucho se intuye.

Ampararse no es miedo: es lectura. Y Manzur siempre ha leído antes que los demás. Las notarías en litigio —asignadas y reconfiguradas durante el eruvielismo— asoman como puerta de entrada para revisar relaciones, favores, firmas y decisiones del viejo régimen. En un contexto donde el PRI mexiquense busca sobrevivir con alianzas rumbo a 2027, el movimiento de Manzur sugiere que algunas piezas del pasado podrían ser usadas como moneda de presión política.

El amparo también envía señales a antiguos aliados dentro y fuera del PRI: si tocan a uno, tocan a muchos. No es solo una defensa jurídica; es una jugada de tiempo para recomponer alianzas y evitar que la justicia selectiva se convierta en herramienta de disciplina política ¿Qué sombra vio Manzur antes que todos?

EL RUMOR: GOLPEAR LA SALUD PARA EROSIONAR LA LEGITIMIDAD

El rumor corrió con precisión quirúrgica: Delfina Gómez Álvarez, gobernadora constitucional del Estado de México y figura central de Morena, se enfermó, dejará el cargo, el Estado se descarrila. Nada cierto; todo funcional. La gobernadora siguió trabajando mientras la mentira viajaba más rápido que la institucionalidad.

Golpear la salud es golpear la legitimidad. No es preocupación: es guerra sucia. Que ocurra cuando se reacomoda el gabinete estatal y se empieza a definir la correlación de fuerzas de Morena rumbo a 2027 no es coincidencia. El objetivo es reducir el peso político de Delfina en la definición de candidaturas, particularmente en el Valle de México, y abrir espacio a negociaciones anticipadas entre grupos internos.

Detrás del rumor convergen intereses de sectores del viejo régimen priista desplazado y de corrientes internas de Morena que buscan acotar la influencia de la gobernadora en la sucesión. El ataque, además, carga un sesgo simbólico: debilitar a la primera mujer que gobierna el Edomex presentándola como frágil ¿Qué revela un rumor sobre quienes necesitan que parezca verdadero?

TECÁMAC: LA FRACTURA TERRITORIAL DE MORENA

Tecámac exhibió la zona sísmica de Morena. Mariela Gutiérrez Escalante, senadora de la República y exalcaldesa del municipio, actúa como jefa territorial con músculo electoral; Rosi Wong Romero, presidenta municipal en funciones, ejerce institucionalidad desde el gobierno local. Entre ambas, estructuras que se deslizan, nóminas que se reacomodan y la sombra política de Higinio Martínez Miranda, histórico operador del oriente mexiquense, pero, también es quien encabeza la ruptura al interior de Morena.

Lo visible fue el choque; lo real es la disputa por el control político del oriente del Estado de México, una de las regiones clave para ganar la gubernatura y las principales alcaldías en 2027. La nómina municipal aparece como base de lealtades y plataforma de proyectos mayores. No estalló un pleito personal, se estrellarse dos modelos de operación política dentro de Morena.

El conflicto de Tecámac funciona como anticipo de la guerra interna que se avecina: control territorial versus legitimidad institucional. La pregunta para el gobierno estatal es cuánto puede escalar esta confrontación sin comprometer la cohesión del movimiento en una región estratégica ¿Quién controla un territorio cuando dos dicen controlarlo?

HUIXQUILUCAN: OPULENCIA SIN CONTABILIDAD

Autos, motos y pantallas: espectáculo público; contabilidad privada. En Huixquilucan, gobernado por el PAN bajo la figura de Romina Contreras Carrasco, presidenta municipal y pieza clave del grupo político de Enrique Vargas del Villar, la abundancia se volvió narrativa de gobierno.

Si el dinero es municipal, debe justificarse. Si son donaciones empresariales, deben transparentarse. Si es promoción política, debe sancionarse. Una rifa no es un regalo: es un mensaje. Y todo mensaje tiene costo. En clave rumbo al 2027, Huixquilucan opera como vitrina de poder y como plataforma de posicionamiento político del panismo del Valle de México.

Las preguntas son presupuestales y éticas: ¿Qué capítulo absorbió la compra?, ¿Hubo aprobación del cabildo?, ¿Los bienes quedaron registrados como activos municipales?, ¿Existieron donaciones privadas no reportadas?, ¿Se trata de promoción personalizada encubierta? La opulencia sin contabilidad no es descuido: es método ¿Qué oculta una fiesta cuando la paga el erario?

DIAGNÓSTICO

El poder no enferma por desgaste corporal, sino por los síntomas que deja su comportamiento: silencio calculado, amparo urgente, rumor anónimo, choque territorial y opulencia sin contabilidad. El sistema no se rompe: se revela. Y cuando se revela, la duda deja de ser crítica para convertirse en defensa. En el Estado de México, donde el poder siempre habló en clave, preguntar no solo ilumina: desnuda.