Restauranteros del EDOMÉX y la CDMX exigen que los dejen abrir
Emitieron una carta exhorto para que las autoridades de ambas entidades definan al sector de alimentos como parte de la cadena esencial en materia económica.
El sector restaurantero del Estado de México y la Ciudad de México emitieron una carta exhorto para que las autoridades de ambas entidades definan al sector de alimentos como parte de la cadena esencial en materia económica, ya que el cierre por el semáforo rojo los está llevando a una “muerte lenta y dolorosa”. El desplegado que resalta la frase “Ya no podemos más”, enfatiza que nivel nacional la industria genera 5.6 millones de empleos directos e indirectos y calculan que de seguir así se perderán 450 mil. Tan solo el cierre de diciembre y los primeros días de enero ha provocado un incremento del 10 por ciento en las fuentes laborales perdidas.
El posicionamiento que está firmado por personas físicas, propietarios de mil establecimientos en las dos entidades, no como un llamado de alguna asociación empresarial en particular; subraya que los restaurantes ya se acabaron sus ahorros, los cuales en muchos casos fueron utilizados en el cumplimiento de las medidas sanitarias; y los periodos de gracia de los acreedores ya se terminaron.
“Tenemos el agua hasta el cuello porque debemos seguir pagando impuestos, proveedores, servicios y con las puertas cerradas es imposible sobrevivir”. Al respecto, Mauricio Massud Martínez, presidente de la Camara Nacional de la Industria de Restaurante y Alimentos Condimentados (Canirac) en la entidad, señaló derivado del cese de actividades, tan solo en el territorio mexiquense se han perdido más de 50 mil fuentes de empleo y han cerrado definitivamente más de 10 mil unidades económicas, por ello es de vital importancia que el sector pueda ser integrado en la cadena esencial a nivel nacional.
Aseguró que el sector ya se encuentra enardecido por la serie de cierres permanentes que se han dado y el incremento en el número de contagios registrados en las últimas semanas, aún cuando sus establecimientos permanecían cerrados. Precisó que dentro de la mesa transversal que se lleva a cabo con diferentes dependencias del gobierno estatal, se dió a conocer que de julio a septiembre se tuvo el menor número de contagios en la entidad, período en que las unidades económicas del sector estuvieron dando servicio con aforos del 30 por ciento.
De tal suerte que esperan que en los próximos días tengan una respuesta por parte de la autoridades para reforzar los protocolos de seguridad dentro de sus establecimientos, la idea es que les permitan regresar a laborar aunque sea de manera limitada.
Indicó que las autoridades ha reconocido que durante las últimas tres semanas en que se retornó al semáforo rojo los índices de movilidad no han disminuido, así como el número de contagios, lo cual establece claramente que son las reuniones privadas y sociales las que han derivado en el alza de contagios y muertes, no así las actividades económicas formales en funcionamiento.
“Desde que se anunció el semáforo rojo en ambas entidades, observamos con precaución y frustración que la venta informal y el comercio de comida ambulante sigue operando sin restricciones. No hemos recibido apoyo de ningún tipo y pedimos ser considerados como actividad esencial”, detalla el desplegado.
milenio