Resortes, el monstruo del baile que dominó el escenario

El humor, la pista y la expresión corporal se le daban como a nadie, lo que le valió al actor Adalberto Martínez su entrada al cine y cosechar una carrera de más de 70 años. Hoy cumpliría 105 años

Su sobrenombre lo decía todo: Resortes.

La forma de moverse en la pista y la corporalidad con que interpretaba a sus personajes en el cine, le valió al actor Adalberto Martínez resaltar de entre otros comediantes con una carrera que comenzó desde finales de los años 40. El baile, señala el crítico de cine Jorge Ayala Blanco, se le daba como a nadie.

“Realmente era un monstruo en la pista y como tal lo aprovechó. Su entrada al cine se la debe, a mi entender, a su capacidad como bailarín”, comenta el experto en entrevista.

“Una de las peores características de los cómicos mexicanos es que eran demasiado verbales y en su caso no, era un personaje muy físico, de los que eran dueños de su cuerpo, no nada más del habla, como sería Cantinflas, como sería el propio Tin Tan, que también era bastante físico pero no tanto como Resortes”, explica.

Fue amigo de Mario Moreno Cantinflas, con quien coincidió en algunas premiaciones.

El actor y bailarín cosechó una carrera artística de más de 70 años con cintas como Baile mi rey (1951), Jóvenes y rebeldes (1961) y La niña de la mochila azul (1979), entre otros, y telenovelas como El abuelo y yo (1992) y ¡Vivan los niños! (2002).

Una de las escenas más emblemáticas de su carrera es precisamente en Baile mi rey cuando, en plena competencia, le entran los nervios a su personaje pero logra sobreponerse y continuar con su pareja (que interpretó la actriz Silvia Derbez), entonces saca un pañuelo y con su estilo propio lo usa para seguir bailando.

“Desde su apodo mismo era un resorte viviente, era algo que no se podía dejar de mover y además tenía una capacidad de expresión, de gestualidad que no tenían los demás. Es un cómico a mi entender bastante poco codificable y muy distinto de todos los demás, es de los que tienen características muchísimo más propias y exclusivas”, dice Ayala Blanco.

Pero hoy, que se cumplen 105 años de su natalicio (nació en la Ciudad de México el 25 de enero de 1916 y falleció el 4 de abril de 2003 a los 87 años) hay un tema que Ayala resalta y que ve con cierta esperanza:

“Creo que las nuevas generaciones no tienen ni la menor idea de quién fue Resortes, pero si se acercan con el cine mexicano se topan inmediatamente con la vitalidad de él, eso es lo importante”, explica.

Ayala considera que en México no existe un gran libro que recabe la historia de los cómicos, pues si bien existe una cantidad enorme de trayectorias no han sido todavía estudiadas, lo que lo hace sentir mejor es que hoy más que nunca se están haciendo estudios sobre el cine mexicano.

Por sus habilidades para el baile, Resortes se distinguió de los demás cómicos.