Desesperación en el búnker de Morena
Testigo fiel
Por: Jesús Torres
A dos meses y días de que se realicen las elecciones, las más grandes en la historia de México, ya hay ‘focos rojos’ en el búnker de Morena y el despacho de Palacio Nacional.
Los impulsores de la mal llamada Cuarta Transformación sienten que en últimas fechas las cosas no les están cuadrando como esperaban, que todo se les está revirtiendo.
Desde la imposición del candidato a la gubernatura de Guerrero, Félix Salgado Macedonio, acusado de violación, y que les generó una repulsa de organizaciones feministas frente a Palacio Nacional y en diversas entidades del país, Morena ha ido en picada en la aceptación del electorado.
La embestida que tuvo el partido de Andrés Manuel López Obrador en las redes sociales activó el ‘cuarto de guerra’ de los morenistas para revertir el golpe mediático pero el daño ya estaba hecho.
Sondeos en las principales plataformas como Facebook, Twitter y YouTube demostraron que de 130 mil mujeres que hablaron del tema, casi el 60 por ciento expresaron su decepción y rechazo hacia el tabasqueño.
Luego vino la ‘paliza’ que recibió la Ley Eléctrica de AMLO después de que jueces del Poder Judicial la suspendieran en definitiva. Un pleito en el que hasta hoy lleva las de perder Morena y el inquilino de Palacio Nacional.
La ‘guerra’ que ha desatado el partido en el gobierno en las redes sociales contra los adversarios de la 4T simplemente no ha prosperado.
El préstamo de 150 millones de pesos que otorgó el banco de gobierno (Bancomext) al documentalista de López Obrador, el productor Epigmenio Ibarra, desató otro escándalo contra la administración amloista que no ha parado nadie, vamos ni las granjas de bots que se presume tienen los morenistas.
A ello habría que sumarle el reciente revés que propinó el INE a Morena al aprobar los criterios para frenar la sobrerrepresentación en la Cámara de Diputados, con miras a las elecciones del 6 de junio.
Con todo eso y las pifias acumuladas por el originario de Macuspana en lo que va de su gestión, sobre todo en materia de salud, seguridad, corrupción y de destinar mayores recursos a obras faraónicas como el Tren Maya, la refinería de Dos Bocas y el aeropuerto de Santa Lucía, las luces de alerta suenan a cada momento en el bando del partido oficial.
Los signos de desesperación cada vez son más frecuentes. Hay incluso quienes ya ven en este caos el derrumbe de Morena.
