Comentario político del periodista Raymundo Medellín para el programa radiofónico “Hablando Claro” de abc Radio que conduce Manuel Aparicio

Leí con atención los boletines tanto de la fiscalía del Estado de México como de la secretaría de seguridad, nuevamente escuché las lamentaciones por parte de un gobernador tibio, que tal parece que lo único que sabe, es hacer eventos para entregar un mínimo de tarjetas rosas.

Qué pena da el gobierno que encabeza Alfredo Del Mazo Maza.

Nuevamente escucho que todo el peso de la ley se aplicará a los asesinos de 13 policías que fueron arteramente asesinados en Llano Grande, paraje de Coatepec de Harinas, nuevamente también declaran que se apoyará a las familias de los policías estatales y de de la fiscalía que fueron acribillados, pero no sería capaz Alfredo del Mazo de decirle, frente a frente, a la esposa e hijos de esos policías, cual es el precio de la vida del esposo o padre de familia, seguro estoy que el gobernador mexiquense no es capaz de enfrentar esta situación´.

En el comunicado oficial del gobierno mexiquense se dice que: “El convoy realizaba labores de patrullaje en la región, justamente para el combate de grupos delictivos que operan en esta zona de la entidad”.

Quién cree que ese convoy realizaba labores de patrullaje con únicamente 13 elementos, los cuales no llevaban armamento especial como se puede apreciar en las fotografías, tampoco llevaban chalecos protectores; ¿Es así como realizan los operativos contra el crimen organizado en el Estado de México, con trece hombres únicamente?

En el medio policiaco todos saben que en esa zona opera desde hace mucho tiempo el crimen organizado, no es la primera masacre de funcionarios del gobierno, hace tiempo le tocó al fiscal Regional de Ixtapan de la Sal de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, Mauricio Blancas Valerio, quien fue atacados a balazos en el municipio de Zacualpan, en la zona sur de la entidad.

Ello, mientras circulaba en una camioneta con cuatro elementos más.

Uno de los cuales perdió la vida y se supo que algunas semanas antes, células del crimen organizado, amenazaron a policías estatales y de la FGJEM que trabajan en la región de Tierra Caliente.

Podría enumerar más casos sucedidos en la zona, sin embargo de lo que queda constancia, es que las promesas de campaña de Alfredo Del Mazo, aunque suene a verso, han resultado un fracaso.

Fuerte y con todo solamente fue un eslogan de campaña contra la inseguridad.

Alfredo del Mazo dijo que en los tres primeros meses de su gobierno se notaria el cambio en la inseguridad que se padecía en el territorio mexiquense, es lamentable pero tal parece que esos tres meses que prometió el gobernador, no han empezado a contar, porque el estado de México tiene uno de los primeros lugares en incidencia delictiva.

Cuántos policía todavía tienen que morir para que se combata la inseguridad y al crimen organizado en el Estado de México, contéstele a sus gobernados don Alfredo y si no puede, pues salga por la puerta grande presentando su renuncia para que al frente del gobierno mexiquense esté un verdadero gobernador, alguien que sí pueda.