Johnson planea enviar blindados a Ucrania tras la petición del Gobierno de Zelenski de “armas, armas y más armas” a la OTAN

El ‘premier’ ha sido hasta ahora el líder europeo más proclive a facilitar el envío de armamento a Zelenski, que periódicamente le presenta una “lista de la compra”

“Armas, armas y más armas”. Así se resume la petición directa a la OTAN del ministro de Asuntos Exteriores ucraniano Dimitro Kuleba a su paso por Bruselas. Desde Londres, mientras, el “premier” Boris Johnson anticipaba el envío de la primera remesa vehículos blindados, tras la decisión de la República Checa de enviar cinco tanques T-72, para permitir el avance de las tropas ucranianas hacia las líneas rusas.

“Mi agenda es así se simple y se resume en esas tres palabras”, recalcaba Kuleba ante el cónclave de ministros de Exteriores de la Alianza, resaltando la necesidad de armas ofensivas para la siguiente fase de la guerra. El presidente Volodimir Zelenski insistía por su parte en la necesidad de ir más allá en las sanciones económicas e imponer un embargo total de petróleo y gas a Rusia.

Boris Johnson marcó el camino a los aliados con el envío inminente a Ucrania de vehículos blindados, según anticipó The Times. El Ministerio de Defensa se debate entre los Mastiff o los Jackall, preparados para tareas de reconocimiento y equipados con artillería pesada. Los vehículos acorazados serían utilizados teóricamente para abrir el paso las tropas ucranianas, pero no para entrar en batalla directa con el ejército ruso.

“Hasta el momento, Ucrania ha llevado a cabo una operación esencialmente defensiva”, declaró a The Times el ex oficial británico y analista de defensa Nicholas Drummond. “Lo que quieren ahora es recapturar el territorio. Y para eso necesitan vehículos que les permitan asaltar las posiciones rusas”.

“Cualquier vehículo que ofrezca protección contra la amenaza de la artillería rusa será bienvenido en esta nueva fase”, aseguró Durmmond. El envío de vehículos blindados podría ser acompañado del destino de especialistas del ejército británico para participar en tareas de adiestramiento a soldados ucranianos en países limítrofes no especificados.

“Las próximas tres semanas van a ser críticas”, admitieron fuentes gubernamentales a The Times. “Los ucranianos han ganado parcialmente hasta ahora al frenar la ocupación, dejar exhausto al ejército ruso y lograr el aislamiento internacional de Putin. La gran pregunta ahora es: ¿Serán capaces de “romper” al ejército ruso y hacerle retroceder? Eso dependerá de la ayuda que seamos capaces de darles.

Boris Johnson ha sido hasta ahora el líder europeo más proclive a facilitar el envío de armamento a Volodimir Zelenski, que periódicamente le presenta una “lista de la compra”. El envío de hasta 6.000 misiles anti-tanques de nueva generación NLAW y Javelin ha sido considerado vital para la defensa de Kiev frente a la avance de la artillería rusa.

El siguiente salto cualitativo lo han marcado los misiles tierra-aire Starstreak, fabricados en Belfast, que han demostrado su efectividad para derribar helicópteros d ataque y cazas en vuelo bajo. El Gobierno ucraniano ha pedido también el envío de misiles anti-barco Tomahawk, considerados esenciales para la defensa de Odesa y la franja de salida al mar Negro.

En lo más alto de la “lista de la compra” propuesta de Ucrania siguen figurando los cazas Falcon y MIG-29 y los tanques T-72 y PT91, que hasta ahora se ha enfrentado a las reservas dentro la OTAN por el riesgo de una escalada en la guerra. La decisión de la República Checa de enviar un tren con cinco tanques T-72 rumbo a Ucrania se interpreta como un posible primer paso en envíos de artillería pesada. Moscú ha advertido que todos las remesas de armas de otros países que entren en territorio ucraniano serán consideradas como “objetivos legítimos”.