Coro de niños de la abadía de Westminster canta en funeral de Isabel II

lunes, 19 de septiembre de 2022

El funeral de la reina Isabel II fue amenizado por el coro de niños de la abadía de Westminster y el de la capilla real del palacio de St James
El coro de niños de la abadía de Westminster y el de la capilla real del palacio de St James, bajo la dirección del organista James O’Donnell, amenizaron el funeral de Estado de la reina Isabel II, un servicio que arrancó el deán de Westminster, David Hoyle.

El reverendo Hoyle comenzó la ceremonia a las 11:00 h local recordando que “con dolor y profunda gratitud, venimos a la Casa de Dios, a un lugar de oración, a una iglesia donde el recuerdo y la esperanza son tareas sagradas”.

“Aquí, donde la reina Isabel II se casó y se coronó, nos reunimos venidos de toda la nación, de la Commonwealth -mancomunidad de naciones-, y de todas las naciones del mundo para llorar nuestra pérdida, recordar su larga vida de servicio desinteresado, y con confianza comprometerse a la gracia de Dios, nuestro creador y redentor”, señaló el religioso.

Agregó que “con afecto, recordamos su amor por su familia y su compromiso por las causas que apoyaba”.

Antes del comienzo del sermón, mientras el féretro era introducido al interior de la abadía y colocado frente al altar, el coro de la Abadía de Westminster entonó, como es tradición, unas estrofas conocidas como The Sentences, con música del compositor inglés William Croft, interpretadas en todos los funerales de Estado celebrados en este país desde comienzos del siglo XVIII.
El primer himno que sonó en la ceremonia fue “The day thou gavest, Lord, is ended“, que también se interpretó durante el Jubileo de Diamantes de la reina Victoria en 1897 y en la ceremonia de la entrega de Hong Kong a China en 1997.

El coro cantó, además, el Salmo 42, escrito especialmente para el funeral por Judith Weir e inspirado por “la inquebrantable fe cristiana de la reina”.

También se escuchó en la abadía el himno que sonó en la boda de la monarca -entonces princesa Isabel- y Felipe de Mountbatten, en 1947: “The Lord’s my shepherd, I’ll not want“, basada en el Salmo 23.
Otras de las piezas musicales preparadas para la ceremonia fueron, según había confirmado el palacio de Buckingham entre sus preparativos, la Fantasia of four parts de Orlando Gibbons, la Romanza (Synfonía número 5 en D) de Ralph Vaughan Williams o el Reliqui domum meum de Peter Maxwell Davies.

Julian Sandford lideró a los Trompeteros de Estado de la Caballería real y Peter Holder se encargó de tocar el órgano.