Monumental legado del Emperador Poeta -Tetzcotzinco

Su significado en náhuatl es “lugar hermoso y apreciado”, construyeron canales, acueductos y depósitos de agua conocidos como “Los Baños de Netzahualcóyotl”.

Fue un ejemplo de obra hidráulica y una maravilla para los ojos de cualquiera por sus bellos jardines, el cerro de Tetzcotzinco alcanzó su máximo crecimiento durante el reinado de Netzahualcóyotl. Por su significado en náhuatl, quiere decir “lugar hermoso y apreciado” y hoy es uno de los cerros más importantes del Estado de México, ubicado en el municipio de Texcoco. Los cerros y montañas siempre han sido un lugar de culto y Tetzcotzinco no fue la excepción, el Rey Poeta Netzahualcóyotl lo eligió y ahí construyó canales, acueductos y depósitos de agua que se conocen como “Los Baños de Netzahualcóyotl”, enclavados en la cima con una de las mejores vistas.

Las construcciones

El Baño del Rey es una tina labrada en roca y tiene conexión directa con El Palacio, el cual se ubica en la parte baja del cerro, y El Baño de la Reina es una tina labrada en piedra que era suministrada de agua mediante un canal ubicado en la parte superior del depósito. El Trono del Rey es una construcción de muros y escalinatas a un costado del cerro Tetzcotzinco; Las Maquetas son un grupo conformado por una serie de rocas labradas, las cuales cuentan con canales, pequeñas pozas de captación de agua, escalinatas así como templos. La Fuente A tiene cinco plataformas en diferentes niveles y dos receptores de agua; La Plaza de las Danzas posee tres plataformas y restos de lo que habría sido el trono labrado en roca.

El Templo de Tláloc también es uno de los más bellos, se encuentra en la parte más elevada y el rostro del dios de la lluvia esta labrado por diversas partes. Se cree que Netzahualcóyotl subía hasta este sitio con sus esposas, pues se estima que tuvo más de 100, incluso hay un baño al que se le denomina El Baño de las Concubinas.

Sin restricciones para visitarlo

Pese a su importancia, esta zona arqueológica no ha sido delimitada por las autoridades del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), lo que ha generado diversos daños. El área conocida como Los Baños, en su mayoría está pintada con aerosol, ya que los jóvenes acuden al sitio a ingerir bebidas alcohólicas o drogas. “Se orinan en el sitio, dejan basura, botellas, hasta ropa, debería ser uno de los sitios más preciados por los mexicanos, es parte de nuestra historia, es una de las obras prehispánicas más importantes de nuestro estado”, aseguró Pedro Contla, habitante de la zona, quien se dedica junto con un grupo de habitantes a realizar jornadas de limpieza. Su libre acceso también ha generado que los habitantes realicen construcciones cercanas y pese a que no las hacen en la delimitación federal, sí han pasado maquinaria, como la que el año pasado dañó una parte de la obra hidráulica denominada Caño Quebrado.

Daños que costarán millones

De acuerdo con las autoridades locales, las reparaciones serán realizadas por el INAH y tendrán una duración aproximada de cuatro meses, lo que costará más de 300 millones de pesos, pero una parte será saldada a través de un seguro. En este periodo, autoridades federales contemplan llevar a cabo todo con una inversión de 4 millones de pesos, obtenidos con una póliza de seguro que el INAH tiene contratada para cubrir siniestros.

Las tareas de rehabilitación serán en un radio de 300 metros que, acorde con los peritajes realizados por la institución, determinaron como vulnerados dentro de las 1.2 hectáreas que conforman la poligonal del sitio. Para ello, informaron que habrá estudios de fotogrametría, así como investigación de carácter histórica-arqueológica, así como el escaneo con láser de los basamentos y los elementos funcionales del antiguo sistema hidráulico. Las mediciones pretenden establecer una restitución volumétrica y la consolidación del espacio dañado, en cuya área se proveía del vital líquido a la actual Zona de Monumentos Arqueológicos de Tetzcotzinco, también localizada en el municipio de Texcoco. Pese a los daños ocasionados, el INAH no puede impedir el paso de personas debido a que varios predios aledaños tienen dueño y es indispensable el uso de caminos, sin embargo, estos no pueden realizar obras o emplear maquinaria cerca y, por ello, desde el daño provocado al Caño Quebrado se asignó a elementos de la policía municipal para evitar mayores desperfectos.

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